HUEVO SI, HUEVO NO
El huevo es un alimento que muchas veces genera dudas en cuanto a si conviene o no incluirlo en la alimentación familiar. Es por esto que me parecía importante resaltar sus características nutricionales y beneficios para la salud.
Según las Guías Alimentarias para la Población Argentina, es aconsejable incluir hasta un huevo por día especialmente si no se consume la cantidad necesaria de carne. Cuando hablamos de carne nos referimos a carne de vaca, pollo, cerdo, pescado entre otras. A su vez, las Guías Alimentarias para la Población Infantil sugieren incorporar huevo entero en las preparaciones a partir de los 9 meses de edad.
El huevo es fuente de proteínas completas que contribuyen a la reparación y regeneración de los tejidos corporales. A su vez aporta grasas saludables principalmente omega 9, la cual contribuye a disminuir el colesterol malo.
También contiene Vitamina B9, importante en la síntesis de glóbulos rojos y de ADN; Vitamina B12 la cual es fundamental para un correcto funcionamiento del organismo; y Vitamina A, encargada de la visión y la cicatrización. Otros componentes son la luteína y zeaxantina, que funcionan como antioxidantes.
¿El huevo es malo para mi colesterol?
Aquellas personas que tengan valores normales de colesterol en sangre, podrán consumir un huevo de forma diaria. Sin embargo, aquellas personas que tienen valores elevados de colesterol, es importante que consulten con su Nutricionista la cantidad de huevos semanales que podrán consumir.
Teniendo en cuenta la alta calidad nutritiva del huevo y los beneficiosos para la salud humana, este alimento puede ser considerado como un constituyente importante en la dieta de personas en todas las etapas del ciclo vital. Puede incluirse en ensaladas o preparaciones como tartas, budines, omelettes, salteados. Es importante destacar que para que su consumo sea seguro en necesario que esté cocido; la yema deberá estar firme y amarilla; y la clara firme y blanca. De esta manera es posible evitar enfermedades clásicas del huevo crudo como la salmonella que genera principalmente diarreas.
¿Cómo saber si el huevo es fresco y puede consumirse?
- Hervirlo en agua, pelarlo y cortarlo a la mitad. Cuanto más centrada esté la yema más fresco será. Lo mismo cuando lo cascamos, la yema siempre debe estar centrada y no aplanada.
- Sumergir en agua el huevo crudo con cascara, el mismo debe hundirse y no flotar!
Para almacenarlos, deben guardarse en la heladera o en lugares frescos a temperatura ambiente. Antes de utilizarlos, se podrán lavar en caso de que estén sucios; ya que si se lavan antes se pierde una capita que los protege de las bacterias.