VIANDAS ESCOLARES

*Por Lic. Diego Sívori – MNº 4870 – UBA

Los niños retoman las clases, lo que hace que se tengan que volver  a preparar las vianditas escolares. Prepararlas suele ser un desafío ya que se trata de pensar menús ricos y tentadores, pero también nutritivos. La alimentación de un niño debe ser completa, variada y suficiente, lo que permite un adecuado crecimiento y desarrollo, he aquí la importancia de no descuidar lo que almuerzan a diario en la escuela. Para ello vamos a plantear algunas estrategias:

Preparaciones prácticas suelen ser tartas o empanadas hechas al horno. Para que sean saludables, la clave está en prestar atención al relleno. Priorizar carnes de vaca y cerdo con poquita grasa o trocitos de pechuga de pollo, en lugar de fiambres y embutidos. Otras opciones pueden ser vegetales mezclados con ricota baja en grasa, queso crema light, queso fresco o huevo.

Otras variantes que se pueden hacer con los vegetales cocidos son las tortillas, los budines o croquetas al horno. También pueden utilizarse como guarnición de algún pedacito de carne como una milanesa.

En cuanto a los sándwiches, estos suelen ser más aceptados por los niños y súper rápidos de preparar. Pueden realizarse con queso fresco o algún pedacito de carne como pechuga de pollo desmenuzada mezclada con queso untable o algún dip casero. Los dips son salsitas que humedecen las preparaciones y se realizan mixeando un vegetal cocido, como zanahoria o remolacha, junto con un chorrito de aceite y condimentos. Para completar el sándwich; éste puede llevar hojas de lechuga o acelga, rodajas de tomate o pepino y sumar alguna que otra verdura como un peluquín de zanahoria rallada. En cuanto al pan, preferir alguno integral para sumar fibra a la alimentación diaria del niño, la cual tiene muchos beneficios principalmente sobre su salud intestinal.

Por otro lado, para beber, el agua es la mejor forma de mantenerse hidratado. Y como opciones de postre, fomentar el consumo de fruta ayuda a alcanzar la recomendación diaria de 5 porciones de frutas y verduras. 

Por último mencionar que es importante cuidar los modos en que se conservan los alimentos en la escuela para evitar algún problema gastrointestinal. Lo ideal es llevar todo en un porta vianda que mantenga el frío y que se pueda calentar en la escuela de ser necesario.